Las lágrimas son una sustancia procedente de un proceso metabólico llamado lacrimación, con la finalidad de lubricar y limpiar el ojo. Dicho proceso se puede llevar a cabo por múltiples razones, ya sea para lubricar y proteger la cornea, para desechar sustancias irritantes, limpiar los ojos, liberar emociones, entre otras funciones.
Las glándulas lacrimales son las encargadas de la producción de lágrimas, que durante su desplazamiento, se moviliza hasta el ángulo interno del ojo y luego llega hasta el conducto lacrimal y finalmente llega a la nariz.
Las lágrimas presentan una composición química que se puede dividir en cuatro secciones: