La isomería de función es aquella en la cual se produce cambios en los grupos funcionales en compuestos que presentan la misma fórmula empírica.
La isomería de función es aquella en la cual se produce cambios en los grupos funcionales en compuestos que presentan la misma fórmula empírica.
Este tipo de isomería se evidencia cuando los compuestos que presentan la misma fórmula empírica, poseen diferencias en la posición de su grupo funcional sobre el esqueleto carbonado.
La isomería es una propiedad bastante habitual en la química orgánica y se observa en compuestos que poseen igual composición química, cualitativa y cuantitativa pero muestran propiedades diferentes. Dicha diferencia en las propiedades es muy sutil, pero en ocasiones se acentúa de forma considerable.
Los ácidos hidrácidos son compuestos inorgánicos binarios, formados por la combinación del hidrógeno con un no metal, del grupo 16 (con excepción del oxígeno) o del grupo 17.
Los no metales suelen ser los elementos del grupo de los halógenos (F, Cl, Br, I) y los elementos del grupo 16 (S, Se y Te). El hidrógeno se presenta en estos compuestos con valencia +1 y los no metales actúan solo con su valencia menor.
Son compuestos inorgánicos binarios, formados por la combinación del hidrógeno con un elemento metálico o no metálico. El hidrógeno participa como anión en la reacción, con carga -1.
Donde:
X: metal o no metal (actúa como catión)
H: hidrógeno (actúa como anión, cuya carga es -1)
Los óxidos son compuestos inorgánicos formados por la combinación del oxígeno con algún otro elemento. Estos pueden presentarse en los tres estados de la materia: sólido, líquido y gaseoso. Son compuestos que se hallan de forma abundante en la corteza terrestre, como por ejemplo: el monóxido de nitrógeno, dióxido de nitrógeno, dióxido de carbono, entre otros.
Óxido básico. También llamados óxidos metálicos, son aquellos que surgen de la combinación de un metal con el oxígeno. Por ejemplo: Na2O
Óxido ácido. También llamados óxidos no metálicos, son aquellos que surgen de la combinación de un no metal con el oxígeno. Por ejemplo: Cl2O3
Óxido anfótero. Son aquellos óxidos formados por la combinación de un elemento anfótero y el oxígeno. Los elementos anfóteros son aquellos que actúan como ácidos y como bases. Algunos metales y metaloides poseen esta característica formando óxidos anfóteros como por ejemplo: zinc, plomo, aluminio, berilio y estaño. Por ejemplo: Al2O3Leer más…«Óxidos: Clasificación y usos»
Los ésteres son compuestos orgánicos producidos por la reacción de los alcoholes con los ácidos. Al reaccionar un ácido orgánico o inorgánico, con un alcohol o fenol, se elimina agua y se forma un éster en el que el hidrógeno ácido ha sido reemplazado por un radical orgánico.
La fórmula general de los ésteres es: R-CO-O-R’
La fisión y fusión nuclear, son términos que erróneamente son utilizados como sinónimos, sin embargo estos poseen más diferencias que similitudes. Hoy te explicaremos en qué consisten cada uno y señalaremos algunas diferencias entre ambos términos.
Hoy en química en casa te enseñamos como comprobar de manera práctica, las propiedades coligativas. Para ello realizaremos experimentos sencillos con materiales que fácilmente podemos encontrar en casa.
Estudiar las propiedades coligativas mediante experimentos sencillos.
Las propiedades coligativas son aquellas que están bastante relacionadas con el cambio de las propiedades físicas que presenta solventes, cuando se le adiciona una cantidad específica de un soluto no volátil.
Las propiedades físicas que varían son: punto de ebullición, punto de congelación, presión de vapor y presión osmótica.
Es importante tener en cuenta que no importa las propiedades del soluto o su naturaleza química, sino la cantidad o proporción de soluto disuelto.Leer más…«Práctica de laboratorio: Propiedades coligativas»
Las reacciones químicas que se encuentran en equilibrio no perciben cambios de manera espontánea, sin embargo se ven afectadas cuando son sometidas a un factor externo, como por ejemplo: la temperatura, concentración, presión y la presencia de catalizadores. Cuando esto ocurre, el sistema reacciona químicamente hasta conseguir nuevamente el equilibrio.