Los metales son mayoría en la tabla periódica y son punto de partida para diferenciar a el resto de los elementos debido a las propiedades físicas que estos presentan.
Muchas de esas propiedades vienen precedidas por el estado natural en la que se encuentran los elementos. En el caso de los metales, la inmensa mayoría se hallan en la naturaleza formando compuestos tales como silicatos, carbonatos, sulfatos, óxidos y sulfuros. No obstante, existe un número escaso de elementos, como por ejemplo el oro, la plata y el platino que se pueden encontrar libres en la naturaleza, es decir, no combinados.
Propiedades físicas de los metales
- Brillo: Los metales reflejan la luz que incide sobre su superficie. La inmensa mayoría de ellos presentan un brillo intenso.
- Dureza: Es la resistencia que oponen las superficies de los metales a dejarse rayar por determinados objetos agudos o minerales. El cromo es el elemento metálico más duro. El cromo tiene un valor de 8,5 en la escala de Mohs, que mide la dureza de los minerales según su resistencia a la abrasión por otros materiales.
- Tenacidad: Es la menor o mayor resistencia que presentan los metales a romperse cuando se ejerce sobre ellos una presión.
- Ductibilidad: Es la propiedad que presentan algunos metales de ser fácilmente estirados en hilos finos (alambres), sin romperse.
- Maleabilidad: Es la propiedad que presentan ciertos metales, tales como la plata, el oro y el cobre, de ser reducidos a delgadas láminas, sin romperse.
- Fusibilidad: Es la menor o mayor dificultad que presentan para ser fundidos, es decir de pasar de estado sólido a líquido. La inmensa mayoría de los metales presentan elevados puntos de fusión.
- Conductividad calórica: Los metales absorben y conducen la energía calórica.
- Conductividad eléctrica: Los metales dejan pasar a través de su masa la corriente eléctrica.
- Densidad: Es una propiedad característica de cada metal, que permite reconocerlo. Se define como la masa de un 1cm³ de cada material. El elemento más denso que encuentra en la naturaleza es el osmio, un metal en la familia del platino, con una densidad de 22,59 g/cm³.