¿Quién iba a imaginar que la moda podría ser mortal? Y es que por allá en el siglo XIX, un poco menos de 200 años atrás, se usaba en el color verde, un componente sumamente tóxico que desencadenó una serie de muertes que alarmaron a la sociedad.
En la época victoriana el color verde estaba reinando en todas partes, era considerado un color romántico y elegante que la gente de alta sociedad quería lucir en todo momento, ya sea para empapelar las paredes, como para usarlo en su ropa, maquillaje y más. Pero no sabían que el arsénico que formaba parte del pigmento, traería tan atroces consecuencias.
El arsénico es un elemento químico perteneciente a los metaloides. Este se encuentra en forma de sulfurosos y escasamente de manera sólida. Desde la antigüedad se conocen compuestos de arsénico, altamente tóxicos y mortales que producían efectos corrosivos en el organismo, pero para la época se creía que era dañino sí solo se manejaba directamente en un laboratorio o fábricas pero nunca llegaron a pesar que su mortalidad incluso afectaba al ser usado en productos.
Como lo revela un artículo de la revista IFL Science, el arsénico dejó muchas muertes en la época victoriana debido a su amor profundo al color verde. Y asimismo, relatan la historia del doctor William Hinds, quién tenía su oficina empapelada de color verde. Este, al pasar los días empezó a tener fuertes síntomas como calambres y nauseas. Pero cuando abandonaba su oficina y se dirigía a su habitación, los malestares disminuían lentamente. Esto lo hizo pensar que algo andaba mal con su oficina.
Y así fue como se fueron presentando más casos alarmantes de niños, mujeres y hombres muertos de una manera extraña pero con algo que todos tenían en común: el color verde, ya sea en sus vestimentas o sus habitaciones.
Se dice que lo que puso fin al uso de arsénico en la pigmentación verde, fue la muerte de una joven llamada Matilda Scheurer, quién a sus 19 años trabajaba como florista y todo el día estaba expuesta al arsénico ya que lo usaba para pintar las flores. Cuando la hallaron sin vida, tenía los ojos y las uñas de color verde y la bilis salía de su boca. Una imagen sumamente espantosa que hizo reaccionar de una vez por toda a la comunidad científica y así prohibir el verde Scheele por sus altas concentraciones de arsénico.
¿Conocías esta historia? Un poco escalofriante pero interesante, ¿no crees?
Fuentes:
- Felton, James (2023). The Victorians regularly died because of how much they loved the color green. iflscience. com
- Zamorano, Enrique. (2023) Verde asesino: el color que supuso la muerte de cientos de personas en el siglo XIX. elconfidencial.com
- Arsénico. wikipedia.com