Las bacterias pertenecientes al género Geobacter están capacitadas para alimentarse de uranio. Por ejemplo, el Deinococcus radiodurans resiste radiaciones 2000 veces más grandes que la cantidad mortal para un ser humano.
Las Geobacter son bacterias anaeróbicas que poseen habilidades que permiten que estas sean necesarias para la biorremediación.
Estas han sido los principales organismos que se encargan de oxidar metales y compuestos orgánicos (por ejemplo: metales radioactivos como el uranio, el hierro, compuestos que derivan del petróleo, entre otros), transformándolos en compuestos agradables para el ambiente.