Este tipo de enlace se caracteriza por la unión de metales, mediante la pérdida de electrones de sus capas más externas, que se reubican más o menos libremente entre ellos, creando una nube electrónica.
Estos átomos se concentran de manera muy cercana unos a otros, lo que ocasiona estructuras muy compactas. Un ejemplo, son los característicos empaquetamiento compacto de esferas (hexagonal compacta), cúbica centrada en las caras o la cúbica centrada en el cuerpo.
Ejemplo:
Los enlaces metálicos son sumamente frecuentes en el mundo atómico de los metales, por lo que cualquier elemento metálico puro es un ejemplo posible de los mismos, a saber:
El miércoles 8 de octubre de 2025, la Real Academia Sueca de Ciencias anunció a…
Los clavos de olor (Syzygium aromaticum) son los botones florales secos de un árbol tropical…
En el mundo de la química, pocas soluciones despiertan tanto respeto como la mezcla piraña.…
La joyería no es solo estética: es química aplicada. Cada metal que brilla en un…
La miel no es solo un edulcorante natural: es el resultado de una compleja sinfonía…
Cuando cocinamos, la cocina se convierte en un laboratorio. Y uno de los experimentos más…